
T iempos de inicio y fin
Que tu beso empiece siempre y en toda circunstancia de una forma suave y sosegada. Para besar de este modo, tus labios apenas deben tocar su piel. El beso debe ser, acá, una suave caricia en sus mejillas, en sus cejas, en la punta de su nariz, en la comisura de sus labios. La boca se convierte, de este modo, en el sensate focus útil.